El árbitro que echaron del profesionalismo luego de un Tolima vs Santa Fe

Jorge Hernán Hoyos dirigió durante 12 años en la máxima categoría del fútbol colombiano. En varios campeonatos fue designado el mejor árbitro de la temporada, pero todo cambió en 2007 cuando terminó su carrera luego de un error en Ibagué.

Se jugaba la última fecha del todos contra todos en el Apertura 2007 y el Deportes Tolima recibía a Santa Fe. Los locales ya estaban eliminados, mientras que el equipo de Pedro Sarmiento debía ganar para clasificar a los cuadrangulares finales. Parecía difícil que los ‘albirrojos’ lograran la victoria, pues venían de una derrota en el clásico y un gran escándalo.

Al parecer varios jugadores estuvieron en una fiesta, donde hubo mucho licor y hablaron de los malos tratos del técnico. Entre ellos estaban: Luis Moreno, Adrián Ramos, Christian Marrugo, Gabriel Gómez, Óscar Castro, David Montoya, entre otros. Al otro día Marrugo y Ramos llegaron tarde al entrenamiento y el panameño Moreno nunca asistió. Se dijo que Marrugo renunció al club verbalmente aunque lo convencieron de quedarse. Moreno y Ramos no corrieron con la misma suerte porque fueron licenciados del club.

Con este nefasto panorama llegó Santa Fe a Ibagué aunque antes del viaje hicieron las paces y un compromiso de lograr la clasificación. En el Manuel Murillo Toro, Léider Preciado abrió la cuenta a los 33 minutos y empató Yulián Anchico a los 68 para el Tolima. A falta de dos minutos Hoyos pitó un penal a favor de los visitantes y el asistente reversó la decisión del central por un fuera de lugar. Un minuto después Agustín Julio derribó a Yedinsson Palacios y esta vez si se decretó el penal.

El escándalo surgió porque la falta se produjo fuera del área. Según una versión el cuarto árbitro le preguntó a uno de los camarógrafos sobre la jugada, este le dijo que no le podía mostrar la imagen pero que la infracción había sido dentro. Más adelante el camarógrafo negó esto y enfatizó que siempre guardó silencio. Marrugo, que había sido uno de los jugadores implicados en el incidente de indisciplina días atrás, se encargó del cobro y le dio la victoria a los capitalinos.

Por este resultado el Bucaramanga se quedó fuera de los ocho y clasificó Santa Fe. Jorge Hernán Hoyos llegó a su camerino y recibió diversas llamadas confirmándole que se había equivocado. El árbitro salió a los medios a aceptar su culpa, argumentó que estaba “colgado” en la jugada y al consultar con sus asistentes lo respaldaron en la decisión.

La polémica con el árbitro caldense duró varios días en los medios y la Comisión Arbitral lo sancionó indefinidamente. El presidente del Atlético Bucaramanga hasta insinuó que debía repetirse el partido, por supuesto esto nunca ocurrió. Hoyos que en ese momento tenía 36 años nunca se imaginó que la sanción no sería indefinida sino de por vida, pues jamás volvió a pitar un partido en Primera División.

Tiempo después el ex árbitro demandó a la Dimayor por la relación laboral que sostuvo y exigiendo algunas prestaciones salariales. En primera instancia ganó el caso pero el Tribunal Superior revocó el falló y determinó que todo estaba saldado porque  era una prestación de servicios.

No todo terminó ahí. Jorge Hernán Hoyos en 2010 encendió aún más el escándalo de su salida. Dijo que lo habían sacado por no compartir algunas actividades que realizaban: “Los árbitros tenían el reinado propio. Yo no participaba de ellos, entonces por eso tampoco les caí bien a esas personas. Me fueron desvinculando porque yo no hacía parte de eso. De pronto lo hacían ellos por gozar un rato, por divertirse, por cambiar de ambiente, pero yo creo que ese tipo de cosas cuando uno es persona pública no se deben presentar”.

Esto cayó directamente sobre Óscar Julián Ruiz que desmintió todo. Además, Hoyos dijo que Ramón Jessurum lo traicionó y fue él quien lo sacó del arbitraje. Según el caldense, después del partido Tolima vs Santa Fe se afectó a un equipo con el que Jessurum tenía unos compromisos con los directivos y por eso el dirigente se vio presionado. Versiones de un lado y otro se manejaron durante varios meses y nunca se terminó de aclarar nada.